¿Cómo afecta el Black Friday al planeta?

El Black Friday es un día oscuro para el medio ambiente. En un solo día, (que ya se ha extendido a una semana e incluso el mes entero en algunos sectores) las emisiones de carbono se disparan en muchos puntos del planeta a golpe de descuento. Como todo lo que tiene repercusión a nivel global, es responsabilidad de todos preguntarnos cómo afecta este fenómeno al medio ambiente.

Las compras online también generan huella

El e-commerce ha crecido más de un 70% en España desde el año 2020. Se tiende a pensar que las compras online tienen un menor impacto en el medio ambiente, pero, ¿es realmente cierto? Te desglosamos brevemente las partes directas e indirectas para entender a qué nos referimos.

El transporte

El envío de las compras que hacemos a través de Internet genera una gran cantidad de gases de efecto invernadero. El transporte de la materia prima a la fábrica,  de los productos fabricados a las tiendas, todas las entregas a domicilio, las devoluciones, los pedidos no entregados que tendrán que seguir en tránsito… Todos estos trayectos congestionan las ciudades y las carreteras, empeorando la calidad del aire que respiramos todos.

Las devoluciones

Los descuentos llaman nuestra atención y provocan compras impulsivas e irracionales. La reflexión llega días más tarde, cuando recibimos la compra, y es entonces cuando optamos por la devolución. España es el cuarto país europeo con más devoluciones en el Black Friday. Y esto nos lleva al punto anterior otra vez.

El embalaje

El packaging de los productos, muchas veces excesivo y desproporcionado, también genera huella de carbono. Gran parte del plástico que se utiliza para embalar los productos que llegan a nuestras casas no se recicla, y acaba en el océano perjudicando a los ecosistemas que allí habitan.

Los residuos

Según datos de la ONU, el 73% de las prendas que se compran durante la semana del Black Friday acaban en vertederos o incineradoras en menos de un año. Por su parte, los aparatos electrónicos, muy demandados también en estas fechas, se convierten pronto en residuos muy contaminantes. Los estudios de la ONU demuestran que solo se recicla el 20% de los residuos electrónicos.

Todo va sumando en la calculadora de CO₂. Debemos ser muy conscientes: los recursos naturales consumidos, así como los desechos que ocasionan las compras del Black Friday generan una elevada huella de carbono.

¿Qué podemos hacer para controlar el impacto de nuestras compras?

Aquí te dejamos algunas ideas para lograrlo:

  • ¿Realmente lo necesito? Muchas veces compramos de forma impulsiva, sin pararnos a pensar si realmente el producto nos hace falta. Debemos preguntarnos hasta qué punto esa compra merece la pena.
  • Apostar por el pequeño comercio local. Esto es sinónimo de consumo sostenible, ya que el pequeño comercio suele abastecerse de proveedores locales y productos de kilómetro cero.
  • Escoger marcas respetuosas con el medio ambiente y que apuesten por la sostenibilidad.
  • Donar los productos que reemplazamos. Dar una segunda vida a aquello que ya no utilizamos es crucial para disminuir residuos.
  • Planificar los pedidos. Si compras por Internet, hazlo de forma responsable y ordenada. Agrupa los productos en un solo envío para evitar múltiples desplazamientos.
  • Compensar. El pequeño gesto de plantar un árbol supone un gran gesto para combatir el cambio climático. Los árboles son nuestros mejores aliados a la hora de reducir el CO₂ de la atmósfera, ya que son capaces de capturarlo una vez se ha emitido.

Si queremos que el planeta no se consuma a pasos agigantados es nuestro deber consumir de forma responsable y compensar (al menos parcialmente) el impacto del Black Friday. ¡En Bosquia te ayudamos!

APADRINA 1 ÁRBOL Y NOSOTROS PLANTAMOS OTRO